Soluciones para la desigualdad social

Son muchas las razones por las que aún hoy en día se siguen presentando situaciones de desigualdad social, diferencias económicas, religiosas y culturales son generalmente las que más suelen establecer esta especie de abismos entre grupos o personas y es entonces cuando llegan esas reacciones y actos que tanto dañan y marginan a la humanidad.

A simple vista podría pensarse que con la abolición de la esclavitud todo está dado para vivir sin ningún tipo de exclusión y con una estructura social más sana, sin embargo este logro corresponde únicamente a un avance pues queda aún mucho camino por recorrer.

Acciones para reducir la desigualdad social

  • Mayor transparencia en los procesos que lleva a cabo tanto el estado como las instituciones públicas, pues es bien sabido que los beneficios suelen ser para las grandes esferas.
  • Una mayor responsabilidad y dedicación para erradicar definitivamente los obstáculos que impiden acceder a la educación y formación profesional.
  • Políticas claras y mayor conciencia sobre la verdadera integración de quienes hasta ahora son considerados como minorías étnicas al igual que para quienes presentan algún tipo de discapacidad.
  • Fomentar constantemente el mercado laboral para que todos los sectores de la comunidad tengan acceso a un oficio remunerado.
  • Motivar la competitividad entre empresas para que los ciudadanos puedan disponer de precios muchos más bajos y así cubrir todas sus necesidades.

Un trabajo de todos

Por lo anterior podría pensarse que prevenir la desigualdad social es una tarea exclusivamente de los gobernantes y lo cierto es que todos tenemos participación en esta lucha, pues cada individuo a partir de su comportamiento diario tiene la facultad de hacer lo propio para no fomentar la dinámica de la exclusión.

Palabras y acciones del día a día marcan la diferencia para que en conjunto se logre un verdadero cambio social verdaderamente sostenible.

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